lunes, 29 de junio de 2009

ILUMINA TU VIDA Y TU PIEL (II)

Como estamos en época estival, mi intención es que este verano saquéis el máximo provecho a vuestra piel, a vuestra belleza y a los cosméticos. Y mi objetivo también es que sepáis muy bien como protegeros del sol. Hay que saber elegir muy bien el FPS (Factor de Protección Solar) óptimo para nuestra piel. Se va a definir el FPS de la siguiente manera: FPS= energía ultravioleta requerida para producir una dosis de eritema mínima sobre la piel protegida/ energía ultravioleta requerida para producir una dosis de eritema mínima sobre la piel no protegida Si se utiliza un FPS 15, indica que nuestra piel aguanta 15 veces más radiación antes de formar eritema que cuando está desprotegida. Lo que pasa es que es un lío elegir protección solar, hay tanto número… 15, 16, 50, 90... Vamos, que no hay 4.5 porque recordaría a ese cuasi-cate que tan mal sienta. Cada vez se tiende a aunar criterios y a no encontrarnos con números dispares. Es decir a no tener FPS 15 y 16, a no tener 50, 60 y hasta 90. Según COLIPA, que es el organismo que marca la legislación europea, a partir de ahora nos encontramos con los siguientes FPS: • FPS baja serían 6 y 10 • FPS media: 15, 20 y 25 • FPS alta 30 y 50 • El FPS 50 va a ser el más alto y a partir de éste al resto de protecciones más elevadas se las denominará como 50+. Muchas veces se piensa que un FPS muy elevado ofrece una protección muy superior con respecto a un FPS menor. A partir de un FPS 25, lo que se incrementa la protección es poco significativo, a lo mejor varía un 2%. Es decir, un FPS 50+ me garantiza una protección a las radiación de un 98% y un FPS 30 de un 96%. Y esa pequeña diferencia no es importante a la hora de producir eritema. Una verdadera eficacia del protector, esta relacionado en utilizarlo con un poco de sentido común: Como regla general renovarlo con cierta frecuencia (2 horas más o menos), renovarlo cuando nos metemos en el agua (aunque sea waterproof), renovarlo cuando nos rebozamos en la arena… Utilizarlo también cuando nos paseemos por la playa, piscina o incluso ciudad. El agua, arena, césped… reflejan la luz solar y estamos recibiendo indirectamente radiación. Y desde luego, sacar provecho al sol de una manera eficaz; no tomar el sol en las horas centrales, protegerse físicamente (gorro o pañuelo, gafas, camiseta…), hidratarse con agua, licuados, zumos, refrescos… No os perdáis los siguientes artículos con respecto a autobronceadores, aftersuns… "Ingeniería de los Cosméticos" está también en facebook, para que puedas opinar, preguntar y consultar

2 comentarios:

  1. Sigue así, Lourdes. Pero no tardes tanto entre entrada y entrada, please, que tengo ganas de leer lo de los autobronceadores y aftersun...

    Muchas gracias por compartir tu tiempo.
    Un abrazo!

    ResponderEliminar
  2. Hola Luis, el blog se actualiza los lunes, salvo fuerza mayor. He estado unas semanas de vacaciones y he querido desconectarme de todo, incluido del blog. Hoy lunes lo vuelvo a retomar. Los autobronceadores y los aftersun tienen que esperar que he respondido a una duda de mis fans.

    Os recuerdo a todos que me podeis enviar dudas, propuestas, temas que querais tratar a:

    lourdesvarade@yahoo.es

    ResponderEliminar